Para dar respuesta a nuestra hipótesis debemos recopilar la información que sea necesaria. Desde aquí, vamos a delimitar el: ¿qué? ¿Con qué? ¿Cuándo? ¿Cómo?, ¿dónde?, ¿para qué? ¿Quién?
¿Por qué? ¿Qué tipo de investigación vamos a realizar?, entre otras. Además, debemos saber cómo vamos a recopilar la información, ya sea por entrevista escrita o grabada, mediciones directas,
encuestas, descripción de comportamientos o sucesos en tablas de observaciones. En un proceso investigativo es necesario ser ordenados y claros con la información que obtengamos. Lo anterior para
no tener perdida de información por falta de registro de datos importantes o por no entender los que tenemos.